Cómo aprender flamenco desde cero

“El flamenco es una filosofía, una manera de pensar y sentir de todo un pueblo y su tradición histórica”. Manolo Sanlúcar.

¿Se puede aprender a bailar flamenco? Para aprender a bailar hay que tener tiempo y paciencia. A parte de muchas ganas. El flamenco es un espectáculo de estética, estilo, carisma y disciplina dancística como ya decía la gran bailaora Matilde Coral.

¿Qué es el flamenco?

El flamenco es Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Declarado por la Unesco en el año 2010.

Es un arte de origen andaluz que integra el baile, el cante y la música de guitarra. Que se basa en el compás de los palos flamencos. Se conoce por su intensidad emocional y se distingue por sus movimientos de brazos y el repiqueteo feroz de sus taconeados. Todo ello acompasado por los rasgueos profundos de la guitarra española.

Es el resultado del mestizaje cultural de Andalucía donde convivían pueblos tan dispares como los gitanos, los árabes, los cristianos y los judío.

Nace a mediados del siglo XVIII pero sus raíces se remontan a épocas anteriores. Conjuga elementos dancísticos y musicales que ya existían en las diferentes culturas. Incluidos danzas africanas y caribeñas.

Clases de baile  

En el flamenco el cante, el baile y la guitarra se fusionan en una sola expresión artística. El bailaor interpreta los sentimientos que expresa el cantaor. El baile se crea con movimientos de brazos y muñecas, contoneos, giros, zapateos, ritmos y contratiempo. El bailaor con la percusión que ejecuta en el zapateo se convierte en una parte más de la pieza musical acompañando al guitarrista y palmeros.

En las clases de baile se enseña una secuencia para después poder adaptarla al ritmo, la guitarra y por último el cante. Trabajando incluso la improvisación. Se comienza por la colocación del cuerpo, el dominio de brazos, el movimiento de las manos, los giros, el zapateado y el quiebro del cuerpo.  

Se aprende las técnicas y el conocimiento de la colocación de piernas y pies para un correcto zapateo. Todas las clases empiezan con estiramientos y calentamientos previos antes para no lesionarse. Se decide que palo se va a trabajar durante una semana completa.

Lo más importante es entender el flamenco a través del propio cuerpo, prestando atención a cada una de sus partes y ganando confianza en los movimientos.

Con la técnica básica aprenderás a escuchar el cante, la guitarra y el ritmo, a entender el flamenco y usar las herramientas necesarias para lanzarte a la improvisación. El flamenco es un arte improvisado.  

Los palos del flamenco

Hay tantos palos flamencos y diversos que es difícil a la hora de seleccionar unos pocos. Los más bailados son las seguirillas, la soleá, la soleá por bulerías, las alegrías, los fandangos o los tangos sin olvidar las sevillanas.   

La alegría tiene el mismo compás que la soleá pero más rápido y como su nombre indica el sentimiento es de fiesta. La soleá es uno de los pilares del flamenco. El fandango proviene de una zona de Huelva y tiene un origen árabe y portugués por lo que recuerda al fado. Las seguirillas presenta un baile solemne y sobrio. Sin ornamentos que proviene del sentimiento triste y doloroso. El tango es uno de los más antiguos. Lo más curioso del tango es que cuando se hace más lento se le denomina tiento.  Las bulerías es el cante y baile más flexible. No hay ninguna fiesta flamenca que no acabe con sus bulerías. Al igual que las alegrías las bulerías muestra un ritmo igual que la soleá pero más trepidante. Y por último las sevillanas que es el más conocido y extendido. A parte de ser un baile en pareja.

El primer paso para aprender a bailar es la actitud.  Apúntate a nuestra clases